Francisco Santana Orts murió en 1941, en circustancias desconocidas, en el subcampo de Gusen tras ser trasladado de Mathaussen.

Francisco Santana Orts, natural de San Vicente del Raspeig, se formó como militar durante la Guerra Civil española. Cuando la tropas nacionales entraron a Cataluña, Santana se encontraba en Barcelona, donde fue evacuado a Francia junto a otros militares. Una vez allí participa en la resistencia francesa contra el nazismo alemán. Será en la línea Maginot, donde Santana es detenido y deportado a Mathaussen.

En 1993 la Secretaría de Estado de ancianos combatientes y víctimas de guerra de Francia, publicó en el periódico oficial de la República francesa, un listado de víctimas españolas “muertas en deportación”.

Se trata de una relación de nombres de republicanos españoles que fueron deportados desde Francia hasta campos de concentración alemanes, tales como Mauthausen o el subcampo de Gusen.

Actualmente, tras conocer los nombres de los ciento trece republicanos de la provincia de Alicante muertos en estos campos de exterminio, la Comisión para la Recuperación de la Memoria Histórica de Alicante se ha comprometido a buscar a los hijos de los fallecidos directos para que se beneficien de una indemnización que el gobierno francés concede a los huérfanos de aquellos republicanos españoles que fueron deportados.

Entre los ciento trece alicantinos muertos en estas circustancias, aparece el nombre de Francisco Santa Orts, natural de San Vicente del Raspeig, nacido el 29 de agosto de 1914 y muerto el 10 de agosto de 1941 en el subcampo de Gusen.

Francisco Santa Orts, hijo de Francisco Santana Jover y María Orts Torregrosa, nació en el seno de una familia tradicional residente en la partida del Raspeig. Junto a él se encontraba sus tres hermanas: la inseparable María, Josefa y la más pequeña Herminia.

Francisco trabajaba en cementos antes de ser llamado para cumplir el servicio militar, un hecho que ocurrió un año antes de comenzar la Guerra Civil Española.

Cuando arrancó el conflicto civil, Francisco estaba de permiso en San Vicente del Raspeig, fue en ese momento cuando recibió un avisó en el que tenía que ir de inmediato al cuartel. Por aquel entonces hacía el servicio militar en Tarragona y era Cabo de gastadores en infantería. Se trataba de un militar excepcional y por este motivo “sus Superiores le recomendaron continuar con su formación académica”, según explica su hermana María.

“Cuando finalizó la guerra mi hermano se encontraba en Barcelona, fue en ese momento cuando evacuaron a los militares hasta un campo de refugiados en Francia”, explica María Santana.

Del medio millón, aproximadamente, que logró llegar a Francia, un gran número participó en la resistencia francesa contra los nazis, cuando en 1940 Alemania invadió Francia.

Además, la gran experiencia bélica de los españoles fue decisiva para forjar las unidades guerrilleras de la Resistencia francesa.

Una vez iniciado el conflicto en Francia, los españoles instalados en los campos fueron llamados para luchar junto a la resistencia. Desde el Ministerio de Defensa francés se propuso dos alternativas a los refugiados españoles: pertenecer a las compañías de trabajo para la construcción de trincheras o enrolarse en la Legión Extranjera, de esta forma podrían continuar viviendo en la República como exiliados.

Entre aquellos hombres y mujeres valientes se encontraba Francisco Santana, un sanvicentero fuera de su tierra que participó en la lucha antifascista y fue deportado por las SS al campo de concentración de Mathaussen, y más tarde trasladado al subcampo de Gusen, donde falleció en agosto de 1941, a los 27 años de edad.

“Nos enteramos de la muerte de mi hermano a los cinco años de morir, a través de la Cruz Roja francesa. Nosotros tenemos la ilusión de ver su nombre en una calle del municipio, para que se acuerde el pueblo de Francisco Santana Orts”.

En la última reunión de la asociación cultural “Cercle d’Estudis- Sequet pero Sanet”, la Junta Directiva decidió dedicarle un libro a la vida de este sanvicentero y de este modo alcanzar la reparación moral y la recuperación de la memoria personal de Francisco Santana Orts. Esta asociación, comprometida con la Ley de la Memoria Histórica, lucha para que F. Santana pueda tener una calle del municipio con su nombre.